El poder de hacer milagros
Empecemos por la palabra "Milagro"... ¿Qué significa para ti? ¿Qué entiendes por "Hacer un milagro"? Si hacer un milagro es ganarse el baloto estamos acudiendo a una de las tantas formas terrenales de ver manifestado algo extraordinario, que no le ocurre a todo el mundo. Pero si te digo hoy que tu, yo y cualquier persona esta en total capacidad de obrar milagros a cada momento... me creerías?
No me creas, pruébalo! Eso si, tenemos que revisar primero la concepción de la palabra Milagro que tienes arraigada en tu consciente. Un milagro nace de un cambio de percepción frente al como vivimos la vida, como afrontamos las situaciones, que posición tomamos frente a los problemas y que actitud demostramos tener ante los desafíos que podemos presentar. Un ejemplo: Afrontar una quiebra económica podría verse como un escenario aterrador, de profundo estrés, de angustia por el futuro y de total incertidumbre. ¿Cómo hacer un cambio de percepción en semejante descripción?
Por lo general, siempre nos preguntamos "¿Por qué pasa esto?". Aquí esta el primer factor de cambio: Cambiemos el POR QUE por el PARA QUE. Haz este ejercicio y verás como cambia todo el sentido de la pregunta, la sensación de victimización que lleva implícita y lo mejor de todo, te deja pensando en que si esto está sucediendo es porque tiene una razón de ser. Una quiebra económica puede tener muchas razones para presentarse: Una falta inconsciente de Merecimiento, un resentimiento arraigado que no permite fluir en prosperidad, una víctima escondida que quiere llamar la atención del mundo y entra en drama, y muchísimas otras más. Para saberlo, hay que trabajarse e identificar el raíz inconsciente de esta situación.
Luego de hacer este análisis podemos cambiar la energía con la que vivimos el momento. Normalmente se espera que se viva en continuo estrés por el tamaño del problema que se está viviendo y que a partir de ahí todo gire en torno a este tipo de sensación: llega la queja, la actitud derrotista, el pesimismo y toda la pandilla detrás. Que tal si (y sólo por probar) cambiamos la energía y le damos una connotación distinta, vibramos en otra actitud más liberadora y conectamos con esa paz interior que vive en cada uno. Respira profundamente, conéctate con esa sensación de total bienestar, tranquilidad que habita en ti y enfrentas la situación desde esta perspectiva. Insisto, pruébalo tu mismo.
Ahora, a esperar. Me refiero a que entregues al universo de forma totalmente agradecida y confiada lo que esta sucediendo y comiences a ver manifestaciones distintas a las que verías si no aplicaras los pasos anteriores. Esperar es soltar, confiar en que la vida es más sabia que tu, sin prepotencias y sin afanes.
La invitación final es a que pruebes, veas, creas y repitas cada vez que puedas, pues este es uno de los tantos ejemplos en los que podemos dejar que la esencia actúe y nos muestre lo bonito que puede ser vivir aquí.
Abrazos de luz,
